El condado de L.A. podría mantener la orden de permanecer en casa hasta el verano

Las autoridades de salud del condado de Los Ángeles advirtieron el viernes que la región necesita aumentar significativamente el distanciamiento social para frenar la propagación del nuevo coronavirus y que las restricciones para permanecer en casa podrían extenderse hasta el verano.

Incluso con el dramático distanciamiento social que el Condado está viviendo actualmente, las autoridades pronostican que hasta el 30% de los residentes podrían estar infectados a mediados del verano sin más cambios de comportamiento, como la reducción de los viajes de compras.

Como resultado, el condado de Los Ángeles está extendiendo la orden de quedarse en casa para el condado más poblado de California hasta por lo menos el 15 de mayo.

Los funcionarios no pudieron dar una respuesta definitiva sobre cuándo se flexibilizará la orden de quedarse en casa.

Bárbara Ferrer, directora del Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles manifestó que “sabemos que levantaremos algunas de las restricciones y esperamos que este verano podamos analizar con detenimiento lo que podría hacerse para relajarnos”.

Mientras que las estrictas medidas de distanciamiento físico en el condado de L.A., en vigor desde hace tres semanas, han tenido claramente un efecto de salvar muchas vidas, los modelos presentados por el Condado el viernes muestran previsiones preocupantes si los funcionarios levantaran ahora la orden de quedarse en casa.

Todavía hay demasiadas personas infectadas con el coronavirus en el condado de Los Ángeles, dijeron los funcionarios. Y hay más de un 50% de posibilidades de que la capacidad actual de camas de la unidad de cuidados intensivos en el condado de L.A., unas 750 camas ahora, podría agotarse a finales de abril.

“Hay más del 50% de posibilidades de que, si no hiciéramos nada para aumentar el número de camas de UCI en el Condado en relación con nuestra cantidad normal, nos quedaríamos sin camas de UCI a finales de abril o principios de mayo”, señaló el Dr. Roger Lewis, bioestadístico y presidente del departamento de medicina de emergencia del Centro Médico Harbor-UCLA. Se está trabajando para incrementar la capacidad de camas de UCI del Condado.

Las autoridades han trazado el camino a seguir para el condado de Los Ángeles. Si la orden de quedarse en casa se anulara rápidamente y la gente volviera a sus hábitos normales, un sorprendente 95.6% de los residentes del condado de L.A estarían infectados con el coronavirus para el 1 de agosto, según las proyecciones publicadas por el Condado.

Manteniendo los niveles actuales de distanciamiento físico todavía resultaría en que el 29.8% de los residentes se infectarán para el 1 de agosto.

Dicho de otra manera: Desechar la orden de quedarse en casa ahora resultaría en 18.000 personas que necesitan ser hospitalizadas en el condado de L.A. a mediados de mayo, en un Condado con menos de 4.000 camas de hospital. Pero conservando el nivel actual de distanciamiento físico mantendría el número de los que necesitan hospitalización por debajo de 1.000 a finales de mayo, y la cifra sería significativamente menor si mejoramos nuestro distanciamiento físico.

Los funcionarios de salud advirtieron que los pronósticos cambiarán con el tiempo a medida que se introduzcan más datos. Pero los datos indican que ahora no es el momento de dejar de lado la orden de quedarse en casa, dijeron.

“El distanciamiento físico está funcionando. Ha funcionado hasta la fecha, y está funcionando ahora, y es importante que ese distanciamiento físico permanezca en su lugar para reducir no sólo la tensión en el sistema hospitalario, sino más significativo en el número total de infecciones”, manifestó la Dra. Christina Ghaly, directora del Departamento de Servicios de Salud del Condado de Los Ángeles. “Es el arma más importante que tenemos en nuestro arsenal para combatir el virus”.

Aún así, Ghaly dijo que cada día se encuentran más infecciones. El viernes, hubo 469 nuevos casos de infección y otras 19 muertes más reportadas.

“Cada individuo contagiado sigue infectando a más de una persona”, precisó Ghaly. Mientras eso suceda, la trayectoria de los casos de coronavirus continuará aumentando.

Incluso el simple hecho de mejorar el distanciamiento físico en un tercio de nuestros esfuerzos actuales tendrá un efecto dramático, dijeron los funcionarios, quienes no están contemplando nuevos mandatos para ampliar aún más sectores de nuestra sociedad - las autoridades locales en toda California ya han dicho que piensan que han hecho en gran medida todo lo que pueden sin cerrar sectores esenciales.

Pero los residentes pueden hacerlo mejor. Los funcionarios verán si una nueva orden del Condado anunciada el viernes que requiere el uso de cubiertas de tela en la cara dentro de los negocios esenciales ayudará. Y los residentes que siguen yendo al supermercado todos los días son instados a reducir sus salidas.

“Para mucha gente la rutina es como, ‘bueno, al menos todavía puedo ir al supermercado’, y lo entiendo... pero en realidad les estamos diciendo, ‘No, sean insensatos y limiten el tiempo que pasan con otras personas, incluso para hacer esas compras esenciales’”, dijo Ferrer.

“No estamos hablando de un nuevo y dramático conjunto de medidas para cerrar aún más partes de nuestras vidas”, añadió Ferrer. “Tenemos mucho de eso en marcha. Sólo vamos a hacer un mejor trabajo tratando de mantenernos seguros, quedarnos en casa, protegernos unos a otros y mantener nuestra distancia”.

Según los datos actuales del Condado y otras comunidades, aproximadamente el 3% de las personas con COVID-19 requieren hospitalización. Un tercio de esos pacientes, o el 1% del total de los casos, terminarán en UCI. La mayoría de los que están en cuidados intensivos necesitan ser puestos en un respirador.

Los funcionarios informaron que hay actividades significativas en curso para aumentar la capacidad total de camas de UCI en el Condado, incluyendo la apertura de un hospital previamente cerrado y la confianza en el buque hospital de la Marina Mercy para llevar a los pacientes que no son COVID-19 a sus instalaciones de cuidados intensivos.

Las autoridades son optimistas en cuanto a que pueden aumentar el número de camas de UCI en las próximas semanas para satisfacer la demanda proyectada. Es posible que se necesiten entre 400 y 500 camas adicionales, incluso si los residentes continúan distanciándose físicamente como lo han hecho en las últimas tres semanas, y “creo que es una brecha que podemos cerrar”, manifestó Ghaly.

El Mercy, anclado en el área de Los Ángeles, añade 80 camas de UCI; Los Angeles Surge Hospital, donde se localiza el campus cerrado de St. Vincent Medical Center, tiene 266 camas, una gran parte de las cuales se pueden convertir en camas de UCI; cuatro de los hospitales del Condado, dirigidos por el Departamento de Servicios de Salud, están considerando añadir de 100 a 150 camas de UCI; y el Condado se encuentra trabajando con hospitales privados para aumentar la capacidad de la unidad de cuidados intensivos.

Ferrer dijo que desearía poder dar una respuesta definitiva sobre cuándo podría levantarse la orden de quedarse en casa.

“Si el sistema de salud no puede mantenerse funcional, también se incrementará mucho la mortalidad de otras personas que igualmente morirán pero de otras enfermedades y afecciones”, observó Ferrer. “En el momento en que empecemos a ver algunos descensos significativos tanto en la tasa de nuevos casos como en la tasa de decesos, podremos hablar de que la gente vuelva a trabajar”.

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