El guitarrista de Maná sorprende a sus fans con el renacer de una joya, ahora en vinilo, mientras comparte su verdadera historia en la música, su romance con la guitarra y el anhelo que tiene, junto a Alejandro Sanz, por la memoria de Paco de Lucía
Los Ángeles se ha convertido en la segunda casa de Sergio Vallín, el talentoso guitarrista de la agrupación Maná, quien el pasado sábado se presentó junto a la banda tapatía en el Kia Forum como parte de su gira “Mexico, Lindo y Querido”.
Ese explosivo concierto de una de la bandas de rock español de México más importantes de la actualidad, se realizó un día después del cumpleaños número 51 de Vallín, el cual lo celebró en esta misma ciudad donde prácticamente estuvo viviendo durante la residencia que hizo el grupo el año pasado en el Kía Forum de Inglewood.
Curiosamente, Los Ángeles es la ciudad fuera de México donde mejor le va a la banda liderada por Fher Olvera e integrada, además de Vallín, por Juan Calleros y Álex González. Es aquí donde, precisamente, el público los considera como suyos. “Es nuestra segunda casa y tanto en lo profesional como lo personal estuve viviendo aquí. Es una ciudad única en el mundo”, le dijo Vallín a Los Angeles Times en Español durante un encuentro en el Gibson Showroom de esta ciudad.
El próximo año, Sergio estará celebrando tres décadas de haber llegado a la banda. Se dice fácil, pero la verdad es que 30 años en un grupo musical son 30 largos años. “Son tres décadas llenas de miles y miles de memorias maravillosas que me ha dado la carrera junto con la banda y me siento muy agradecido”, comentó el músico nacido en la ciudad de México, pero criado en Aguascalientes, un estado en el centro-norte de México, conocido por sus viñedos, su arquitectura colonial y sus aguas termales.
Vallín, nacido un 26 de mayo de 1972, llegó a los 13 años de edad a uno de los estados mexicanos más pequeños, conocido también como centro manufacturero de vinos de mesa, aguardiente y otros licores de frutas. A pesar de su pequeño tamaño, Aguascalientes cuenta con una rica tradición culinaria.
Pero la familia Vallín no llegó a Aguascalientes atraída por la belleza geográfica o arquitectónica del lugar, por los vinos o sus variados platos típicos, no. La verdad es que los padres de Sergio decidieron llevarlo junto a sus hermanos Rocío, Fernando y Emilio a vivir a la provincia como una manera de alejarlos de las tentaciones que se podían originar en una complicada y enorme metrópoli como siempre lo ha sido la Ciudad de México. Los Vallín vieron que sus hijos estaban creciendo y se los llevaron para ir en busca de un mejor futuro y sin los peligros de la capital. “Y ahí llegué a los 13 años. Y fue cuando empecé a estudiar guitarra clásica”, recordó Vallín sentado en un banco redondo con la inscripción de Gibson ubicado en el centro de la sala de exhibiciones.
Rodeado de los diferentes modelos de guitarras Gibson que estaban exhibidas en las paredes, Sergio nos contó que ya tocaba guitarra desde que vivía en la capital mexicana. De hecho a los 8 años de edad fue cuando comenzó su romance con la música al formar parte de un grupo musical local de estudiantes. Pero no fue sino hasta que llegó a Aguascalientes cuando esa pasión por la guitarra creció y comenzó a tomar forma. “Entré a la casa de la cultura, empecé a estudiar guitarra clásica y ahí quedé perdidamente enamorado de la música de la guitarra y ya no la solté”, nos contó emocionado el guitarrista que desde siempre admiró a The Beatles, The Rolling Stones y The Doors.
La llamada que le cambió el rumbo de su vida
La destreza de Sergio con las cuerdas le permitió darle clases particulares de guitarra a otros jóvenes de su misma edad. Pero luego, el talento que también tenían sus hermanos los llevó a formar una agrupación a la que decidieron llamar Wando. A la edad de 21 años, Sergio y los Wando participaron en el festival de valores juveniles y al final lograron el primer lugar de la competencia. En ese mismo certamen una joven llamada Ana Bárbara, hoy convertida en la “reina de la música grupera”, también se llevó el primer puesto, pero en la categoría individual.
Todo esto surgió en paralelo cuando en una tarde de ensayos en la casa de sus padres, el teléfono en la casa de los Vallín repicó y la madre de Sergio le dijo que un tal Fher Olvera, del grupo Maná, quería hablar con él. Por supuesto, la llamada sorprendió a Sergio, pues no podía creer que el líder de una de las bandas de rock en español de México lo estaba llamando por teléfono.
“Llevaba mi Walkman con un cassette y le dije ‘Kiko (Cibrian) yo te admiro mucho y me gustaría tomar clases contigo’. Me respondió que era imposible porque estaría de tour. Pero luego me dijo, ‘déjame tu cassette’”
— Sergio Vallín/Guitarrista de Maná
Mucho antes de esa llamada que cambiaría su vida para siempre, Sergio y los Wando ya tenían hambre de compartir y expresar con la gente lo que hacían con su música y aquel festival de talentos fue el empujón que les permitió una exposición importante a nivel nacional y seguir soñando con el éxito más allá de las fronteras locales.
Pero sí, la historia de Sergio en solitario cambió a partir de esa llamada, mientras sus hermanos continuaron con Wando por un tiempo. “Y fue cuando yo me fui con la banda Maná, mis hermanos siguieron un tiempo, pero fue una época muy bonita. Y mi historia cambió cuando me subí al tren de la banda”, recordó el guitarrista de larga cabellera y ojos pequeños frente a la cámara de Los Angeles Times en Español.
Pero ¿cómo llegó a oídos del líder de la banda Maná el talento de Sergio Vallín? Mucho se ha dicho al respecto y hasta han publicado que fue gracias a un concierto de Luis Miguel en el que conocieron a Kiko Cibrian, guitarrista y productor de algunos de los temas del Sol de México.
Pero lo cierto del caso, es que Sergio Vallín desde siempre fue admirador del talento de Kiko Cibrian, tanto como productor, como guitarrista. Y en una oportunidad en la que Luis Miguel se iba a presentar en concierto en Aguascalientes, a Sergio se le ocurrió ir en busca de su gran oportunidad.
Al enterarse de la llegada de Luismi a su ciudad, Sergio se puso a investigar en cuál hotel iban a llegar y sin pensarlo dos veces se lanzó en busca de Cibrian para mostrarle su talento con la guitarra. “Yo llevaba mi Walkman con un cassette y le dije ‘Kiko yo te admiro mucho y me gustaría tomar clases contigo’. Me respondió que era imposible porque estaría de tour. Pero luego me dijo, ‘déjame tu cassette”, recordó.
Esa misma noche Cibrián invitó a Sergio y a uno de sus hermanos que lo acompañaba para que asistieran al concierto de Luis Miguel. Ellos aceptaron la invitación, disfrutaron del concierto, pero al finalizar ahí quedó todo y se fueron a su casa decepcionados. Seis meses después llegó la inesperada llamada de Fher Olvera.
Resulta que el cassette que le habían entregado a Cibrián, pasó a manos de un productor de Los Ángeles llamado José “Pepe” Quintana, quien también había trabajado algunos proyectos con Luis Miguel y con Maná. Un día Fher le preguntó si conocía a un guitarrista y Quintana, (fallecido recientemente), le dijo que no, pero qué le preguntaría a Kiko Cibrian… El resto es historia.
Tras la audición con los integrantes de la banda, Sergio llegó para sustituir al guitarrista César López “El Vampiro”, justo en el momento que Fher, Álex y Juan habían decidido que serían un trío. “Pero llegué a la historia de Maná y me sumaron de inmediato”, nos contó.
“Con Maná siempre he tenido un terreno fértil, donde he podido plantar mis semillas e imaginate ya voy a cumplir 30 años el próximo año”, agregó con emoción.
Desde que pudo formar parte del grupo, Sergio ha vivido su propia historia con Maná y así fue que grabó “Cuando los ángeles lloran” (1995), el primer disco de estudio con Sergio como guitarrista principal.
Después participó en “Sueños Líquidos” (1997), “Maná MTV Unplugged” (1999), “Revolución de Amor” (2002), “Drama y Luz” (2011) y “Cama Incendiada” (2015).
También ha participado y ha hecho arreglos en algunos de los sencillos que la banda ha grabado y que formarán parte de un álbum de duetos que se ha dilatado para el resultado final, pero que incluye temas que ya han sido lanzado junto a artistas como Alejandro Fernández (“Mariposa Traicionera”), Christian Nodal (“Te lloré un río”), Joy Huerta (“Eres mi religion”), Pablo Alborán (“Rayando el sol”) y Mabel (“El reloj cucú”), entre otros.
Muchos de los grandes temas del grupo han contado con la colaboración y algunas composiciones son de Sergio Vallín junto a Fher. De hecho debutó como compositor en “Sueños Liquidos” con el tema de influencia flamenca “Ámame hasta que muera” y como cantante, lo ha hecho en el álbum “Revolución de Amor” con el sencillo “¿Por qué te vas?”, dedicado a sus padres. “Eso fue más que nada circunstancial porque en esa época justamente mis padres habían fallecido y en ese momento me dijeron ‘cántala tú’ y esa fue mi participación como cantante”, aclaró Vallín.
También compuso el tema “No voy a ser tu esclavo” junto a Fher y tocó con Carlos Santana en el solo de guitarra de “Justicia Tierra y Libertad”. Para Sergio, la gira “Jalisco Power” junto a Carlos Santana tuvo un significado especial. Ya habían compuesto “Corazón Espinado” especialmente para Santana y tras esa experiencia Sergio admitió que tocar al lado del ídolo de su juventud ha sido uno de los momentos más gratificantes de toda su carrera.
En el álbum “Amar es Combatir” escribió “Somos Mar y Arena”, “Relax” y junto a Fher Olvera hicieron “Bendita tu Luz”, la cual se grabó con Juan Luis Guerra. “Pero el compositor principal en la banda es Fher, por supuesto Álex también compone y a mí también me han dado la oportunidad de componer. Hemos hecho algunas cosas juntos, otras no. En Maná somos una familia, somos un equipo, y en la lluvia de ideas surgió lo de invitar a Alejandro Fernández, a (Christian) Nodal y así nos hemos divertido mucho y pasando el tiempo haciendo lo que nos gusta”, compartió con una sonrisa.
Apoyo incondicional
Sergio Vallín, considerado uno de los mejores guitarristas latinos en la actualidad, confiesa que siempre ha encontrado apoyo de sus compañeros de la banda en las locuras que se le ocurren. La primera fue la creación de un álbum de concepto titulado “Bendito entre las mujeres” (2009), el cual fue compuesto y producido por el propio Vallín junto a Sebastián Krys. El disco contó con la participación de cantantes como la española Ana Torroja, Natalia Jiménez, Ely Guerra, Rosana, Joy Huerta, Raquel del Rosario, María José, Paulina Rubio y Janette Chao, entre otras.
La segunda “locura”, como él mismo lo llamó, fue “Microsinfonías”, un trabajo que lanzó en 2021 directamente en las plataformas musicales, pero ahora dos años después, “Microsinfonías” llega con otro rostro, con un formato en vinilo. “Es un disco que la mitad está inspirado en obras de compositores que admiro y la otra mitad es original. Y algo que hace muy valioso a este disco es que esos amigos que tengo de la música están ahí presentes, pero tocando. Nosotros los conocemos como cantantes y compositores, pero no en la parte instrumental”, señala el guitarrista.
Esos artistas a los que se refiere Vallín son Alejandro Sanz, Juan Luis Guerra, Marco Antonio Solís, Fher Olvera, pero también están instrumentistas como el violinista libanés Ara Malikian, la guitarrista clásica paraguaya Berta Rojas, el trompetista Arturo Sandoval y el guitarrista estadounidense Steve Vai, además de la participación de la Orquesta Sinfónica de Praga.
En este trabajo, “El Buki Mayor” Marco Antonio Solis, le pone su toque personal a las percusiones en el sencillo “Dónde estará mi primavera” que junto a las cuerdas de la guitarra Gibson signature Sergio Vallín 1955 Les Paul, suena en el formato vinilo con una textura que solamente lo pudo lograr el roce de la aguja sobre el disco.
El español Alejandro Sanz interpreta la guitarra flamenca en el tema “Cuando nadie me ve”, mientras que Juan Luis Guerra le da un toque de jazz en guitarra eléctrica a su clásica “Bachata rosa”.
Fher Olvera, amigo y compañero de Maná, toca la armónica en una interpretación magistral de “Vivir Sin Aire”, que cuenta con los arreglos de Vallín y Edy Lan.
Para las composiciones originales del álbum, Vallín invitó a la guitarrista clásica Berta Rojas y al guitarrista estadounidense Steve Vai, quien es conocido por haber realizado giras con Alcatrazz, David Lee Roth y Whitesnake. Vai también ha grabado con artistas como Public Image Ltd, Mary J. Blige, Spinal Tap, Alice Cooper, Motörhead y Polyphia, entre otros y además este guitarrista es una de las influencias más importantes en la carrera de Vallín.
Desde su creación, esta producción siempre tuvo unas características especiales por haber sido grabado con la Orquesta Sinfónica de Praga lo cual se convirtió en un concepto, bajo la perspectiva de Vallín, “de música clásica pop, por así decirlo”.
Un rostro dorado
Dos años después de ese lanzamiento en las plataformas digitales, Vallín, de la mano de Gibson y Rey Vinilo decidieron lanzar esta edición de lujo, de solamente 100 copias, que incluye un disco LP vinilo dorado, una copia del álbum en CD, una foto autografiada, tres púas de guitarra exclusivas de Sergio Vallín y Gibson, un parche conmemorativo para coserlo sobre una chamarra o una gorra y un juego de cuerdas Gibson para guitarra eléctrica, además de un código para descargar las partituras del álbum.
El disco de vinilo en dorado se hizo de ese color y diseño en honor a la primera guitarra Gibson signature del guitarrista mexicano. Se trata de la Sergio Vallín 1955 Les Paul Goldtop, del Gibson Custom Shop Murphy Lab, la cual fue meticulosamente diseñada para que los fanáticos y entusiastas de las cuerdas experimenten esta guitarra que viene a ser la extensión de los brazos y manos de Sergio.
Alejandro Sanz llega con su nuevo tour en vivo a los Estados Unidos, incluyendo un concierto en L.A.
El recorrido del “Sanz en Vivo USA Tour’ finaliza en el Microsoft Theater de Los Ángeles, momento en el que el artista dijo que podría aprovechar para visitar la exhibición de Shakira en el Museo del Grammy y antes de que se celebren los Latin Grammy en Andalucía, España
Cabe destacar que Vallín es el único músico latino con una guitarra de edición limitada Gibson Les Paul Goldtop nombrada y diseñada en su honor y lo más atractivo es que se creó en tono dorado. “Y qué mejor que ‘Microsifonías’ se encarne en un disco de vinilo dorado”, expresó con orgullo. ¡Y vaya que debe estarlo!
Una de las características de este disco es el diseño artístico en relación al diseño de las fotografías, los créditos y las portadas en las que se incluyen impresiones de pinturas con los rostros de las celebridades involucradas en el aspecto musical. La portada consta de seis caras y un forro adicional con los créditos de cada uno de los 7 temas que componen el acetato, además de los agradecimientos, dedicatorias al equipo de trabajo, a sus invitados y a los 100 afortunados fans que tengan de privilegio de tener en su poder una de las copias de estuche de lujo negro y de pasta dura con letras doradas.
Aunque se trató de un trabajo que como él mismo lo dijo, tomó más tiempo del esperado, el resultado superó sus expectativas. “Más que nada es el resultado del trabajo de un equipo y que Gibson siempre confió en mí y esta guitarra la toco en el tour (“Mexico Lindo y Querido”), por supuesto, y es el resultado del trabajo, del tiempo y de la pasión de una familia que es Gibson, que junto conmigo sacamos esta guitarra”, señaló el guitarrista que aunque se ha inclinado al rock y el pop, desde siempre también ha sido admirador del flamenco y la guitarra clásica del desaparecido Paco de Lucía.
Precisamente y coincidiendo con su amigo Alejandro Sanz, Vallín desearía que ahora que se estará celebrando el 16 de noviembre la ceremonia del Latin Grammy en Sevilla, España, sería una estupenda oportunidad para que la Academia Latina de la Grabación le rindiera un tributo póstumo a uno de los más grandes guitarristas del género flamenco como lo fue Paco de Lucía.
“Para el flamenco, yo creo, que no ha habido alguien más grande que Paco (de Lucía) Entonces, definitivamente, tienen que hacer algo (un homenaje póstumo) con Paco de Lucía (en los Latin Grammy de Sevilla)”.
— Sergio Vallín
Precisamente en este encuentro con Vallín en Hollywood, el guitarrista aprovechó para compartir una anécdota que tuvo con Paco de Lucia durante la última vez que el guitarrista visitó la ciudad de Guadalajara, en México.
“Fui a verlo al auditorio Telmex y llevé una guitarra porque quería que me la autografiara en el camerino. La firmó y a los dos meses murió. No nos lo esperábamos y yo creo que mucha gente sentimos, incluyendo a Alejandro Sanz, porque lo hemos platicado, que no se le dió (el reconocimiento que siempre mereció) porque para el flamenco, yo creo, que no ha habido alguien más grande que Paco y El Camarón (de la Isla), pero en la guitarra, no ha habido más grande que él. Entonces, definitivamente, tienen que hacer algo con Paco de Lucía”, expresó el guitarrista.
Mientras llega la fecha de los Latin Grammy, Vallín espera con entusiasmo la llegada del 2024, pues el próximo año cumplirá sus 30 años de perlas como integrante de la banda Maná y eso habrá que celebrarlo.
“Se dicen fácil 30 años, pero es un montón de tiempo y más en el rock & roll”, concluyó con una sonrisa y listo para compartir con su público que llegaba a la sala del Gibson para la posibilidad de ser uno de los 100 afortunados en obtener una copia firmada de sus “Microsinfonías” dorada.
Suscríbase al Kiosco Digital
Encuentre noticias sobre su comunidad, entretenimiento, eventos locales y todo lo que desea saber del mundo del deporte y de sus equipos preferidos.
Ocasionalmente, puede recibir contenido promocional del Los Angeles Times en Español.